lunes, 5 de septiembre de 2011

PABLO NO HAGAS COMO EL AVETRUZ


Siento pena por los renegados que no solo olvidan y niegan a su tierra sino que se ponen a disposición de los enemigos de la Revolución vaya usted a saber con que propósitos, quizás en busca de una “lisonja”.

Hablar de libertad de expresión y negarse hablar en un medio es casi lo mismo, sin embargo no tuvo reparo que otros medios al servicio de la ultraderecha que solo quiere ver destruida la revolución y todas sus conquistas, lo entrevistaran y publicaran sus opiniones.

Ver cuanto no se ha hecho y desconocer las atrocidades que cometen los gobernantes del país que el considera el paradigma de la libertad de expresión, es una herejía. Pero aun más, cuando ese propio país a propiciado la muerte de cientos de sus compatriotas por el solo hecho de ser revolucionario, somete uno de los bloqueo mas feroz de la historia de la humanidad para su vergüenza contra un pequeño estado, cuando allí en ese mismo lugar fueron encarcelado cinco de sus hijos por el solo hecho de proteger a su nación de agresiones y actos de terrorismo. Ese pedazo de tierra donde se pasea impunemente un terrorista que tiene a su haber varias acciones comprobadas de actos criminales como el derribo del avión en Barbado.

Pablo tienes poca ética y además como dices que estas cansado de decir lo que te molesta y qué esta mal donde no hay libertad de expresión: entonces como vives. Esperaras en el portal de tu casa pasar a tus enemigos porque la tecnología selectiva sabe donde vives y de atacar a Cuba no lo hará en tu casa para dañar al valiente Pablo. Echa una mirada a Libia, Irak, Pakistán o Egipto por solo mencionar los últimos acontecimientos.

No soy el único defraudado con tus comentarios que dan vergüenza, hay muchos que no creen en ti desde hace mucho tiempo por inconsecuente contigo mismo y con tu familia.

Yo por lo menos no espero nada, solo que te des cuenta que te están usando, algo que al parecer te molesta tanto.

1 comentario:

radioalamano dijo...

Pedro. Estoy de acuerdo con tu comentario. Ese hombre, que fue declarado, hace ya muchos años atrás, hijo ilustre de Bayamo, no merece la gloria que ha vivido en su país. Ya por el portal de su casa pasa el espectro de un Pablo que fue querido, y que ahora no merece ser respetado porque nos irrespeta.
Alberto Cordoví Benítez.