En las distintas reuniones y asambleas donde se discute el proyecto de lineamientos de la política económica y social se pone de manifiesto que se ha estudiado el documento, se puntualiza lo necesario, se reclama aclaraciones y se hacen propuestas para enriquecerlo.
Solamente estamos en los comienzos de este proceso que requiere, como hemos dicho en otras ocasiones, emplear toda la inteligencia y sabiduría popular para lograr avanzar con pasos firmes, consolidando cada aspecto recuperado y encaminar el resto hacia horizontes firmes.
No hay en este proceso, nada que no debamos estudiar, analizar y proyectar la mejora de la economía del país. Todos son de vital importancia: la producción agrícola, industrial, energética, turística, el sistema presupuestario, las regulaciones fiscales, la política monetaria por solo mencionar algunas contenidas en el proyecto que se discute.
Ahora bien, todo, pero absolutamente todo, pasara por lo que asumamos como nuestra responsabilidad ante cada tarea que nos toque desempeñar.
Trabajar con disciplina será nuestro principal deber, no importa la posición que ocupemos ante la mirada exigente de la sociedad, que en tanto individualmente aportemos, socialmente nos estarán evaluando sobre la marcha.
No vale querer tener si no somos capaces de aportar con calidad, tanto en la producción como en los servicios. No solo pedir, que será un ejercicio lícito como ciudadano, sino saber que a nosotros también nos pedirán y debemos entregar con la misma vehemencia que pedimos.
No hay comentarios:
Publicar un comentario