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sábado, 22 de diciembre de 2012

La injusticia, huérfana de medios antes de 1959


Los medios de comunicación cubanos antes de 1959 respondían a la oligarquía de turno, no apreciaba en los contenidos informativos o de otra índole las diferencias sociales, la desnutrición y desempleo con mayor fuerza en las zonas rurales y suburbanas.

El reflejo cotidiano hacía hincapié en las posibilidades que el sistema imperante daba de forma virtual para los pobres y solo de acceso para los ricos. Ni una línea a lo que dañaba a la sociedad, silencio a los atracos, corrupción tanto por los criollos como por los extranjeros.

Algunos espacios se abrieron a voces como Eduardo Chibas, que al suicidase la nueva República constituida en 1902 sólo contaba 49 años de estrenada. Muy breve período en la historia de un pueblo, no exento de profundas conmociones sociales en la búsqueda de su cauce nacional y democrático. Guido García Inclán desde el periódico del aire denunciaba con valentía hacia donde conducían al país la dictadura imperante en la década del 50 del siglo XX.

Vandálica, humillante y triste se veían las calles llenas de niños con caras sucias y vientres hinchados, no precisamente por la llenura de un banquete sino por la abundancia de paracitos que le provocaba la poca higiene y la paupérrima alimentación; esas mismas calles que sufría el llanto de muchos padres por no poder traer a casa un bocado de comida; esa que bajó la mirada ante la vergüenza del campesino ultrajado frente a su familia; esa que sonrojada compartió con sus mujeres la humillación de la inferioridad. La discriminación racial que llegó hasta la segregación de negros y mulatos ante una sociedad que preconizaba solos posibilidades a los blancos.

Esa realidad era desconocida para los medios, donde no existían espacios para alimentar la esperanza, fomentar el optimismo bajo banderas de lucha y pervertir con anuncios comerciales los contenidos de las novelas rosa donde el melodrama hizo gala de personajes que alimentaban la ilusión de posibilidades a una vida mejor al precio de sometimiento y vejaciones de los ricos hacia los pobres.

En una encuesta realizada en 1957 resaltaba que los obreros agrícolas mal vivían solamente con 25 centavos diarios para comer, vestirse y calzarse y en muchos lugares era solo para los alimentos pues el pago se realizaba a través de bonos. El 60 % de los hogares del campo eran bohíos de techo de guano y piso de tierra sin agua corriente ni letrina sanitaria.

Hablar de refrigerador era desconocido para que servía y solo el 3% lo poseían, otro tanto ocurría con el fluido donde solamente alrededor de 12 % tenían corriente eléctrica. Peor aun sucedía con la composición nutricional donde eran casi inexistentes las proteínas.

Hoy esta realidad cubana es conocida por descripciones y no faltan quienes creen que es una campaña política de la actualidad, pero los que alcanzamos a vivirla sabemos el rigor y el abuso que se cometían con los pobres y los desclasados.

Desde muy temprano en la sierra maestra, con la aparición de Radio Rebelde, se fue abriendo paso a la verdad y se denunciaba con fuerza los crímenes y atropellos que cometía la dictadura de Fulgencio Batista.

La desproporción de la convivencia social hacia mella cuando la capital, solo con el 22% de la población disponía del 65% de los médicos y el 62% de las camas hospitalarias. Paradójicamente en el campo los servicios médicos eran casi nulos o nulos por no constituir prioridades esas poblaciones sin poder adquisitivos. De esta realidad no se ocupaba ningún medio cubrirla y poner en las páginas o antenas para denunciar la discriminación ya no solo por un problema de raza sino porque en ese terreno no interesaba ni a los políticos, comerciantes o cualquier estructura de poder pues este segmento de la sociedad no podía concurrir a la competencia del mercado.

Cuba cuenta desde la segunda década de la primera centuria del siglo XX la radio que desde 1922. Luego, a mediados de siglo se incorpora a los medios ya existentes, uno más completo y aglutinador: la Televisión.

Todos estos acontecimientos repercuten considerablemente en la agilidad, actualidad y dinamismo del ejercicio periodístico; sin apartar el espacio cada vez mayor que ocupaba la propaganda y la publicidad dentro del sistema de los medios de prensa. Precisamente el desarrollo de este fenómeno, garantiza en extraordinaria medida el sostenimiento y avance indiscutible de tantos periódicos, emisoras y canales de TV en esa época.

A la par de ese oportuno desarrollo, la sombra capitalista resguarda sus intereses en cada sector de la nación cubana. Según Ernesto Vera y Elio Constantín en “El periodismo y la lucha ideológica, durante los años de la república mediatizada la prensa dominante en Cuba tuvo un carácter netamente imperialista, reaccionario como consecuencia de la situación semicolonial”.

Quedaba claro, sin lugar a duda, que la libertad de prensa solo era ejercida por el poder y sus intereses, los profesionales de la prensa no eran consultados y lo más significativo de esta etapa es que todo periodista que se saliera de esta estrategia de comunicación podía ser separado o reprimido por las autoridades del gobierno dictatorial de turno. Siempre esta prensa encontró apoyo en la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), agrupación de dueños de las grandes publicaciones del continente, sin contar tampoco para ello el criterio de los periodistas asalariados integrantes de sus redacciones.

Al triunfar la Revolución en 1959 la prensa como toda la sociedad comienza un nuevo sendero hasta ese momento desconocido en la región donde la verdad constituye su paradigma. Preparar a los profesionales en el ejercicio de orientar e informar al pueblo fue tarea priorizada desde sus inicios. Ante estas tareas nace la idea de organizar a los profesionales de la prensa en la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), fundada el 15 de julio de 1963. Organización que ya comenzó su proceso para en junio efectuar su IX Congreso donde se debatirá los retos que hoy asume los medios de comunicación y sus profesionales para acompañar de forma eficiente y eficaz las transformaciones emprendidas bajo la bandera del socialismo.

Este proceso no solo cambia las formas de hacer sino las formas de pensar de cómo hacer. Hoy la prensa cubana cuenta con profesionales de calificación superior a otras etapas incluido categorías académicas y tecnologías que posibilitan el mayor acceso a la diversidad de fuentes.

El IX Congreso de la UPEC trazará, bajo la orientación del Partido, estrategias dinamizadas de una parte por los reclamos que hizo el VI Congreso y la I Conferencia del Partido Comunista Cubano y por otra parte para enfrentar sofisticadas campañas a través de los medios que han empleado presupuestos millonarios para sembrar el desaliento, la desconfianza y pretender hacer creer la invalidez del socialismo en Cuba.

La injusticia, huérfana de medios antes de 1959


Los medios de comunicación cubanos antes de 1959 respondían a la oligarquía de turno, no apreciaba en los contenidos informativos o de otra índole las diferencias sociales, la desnutrición y desempleo con mayor fuerza en las zonas rurales y suburbanas.

El reflejo cotidiano hacía hincapié en las posibilidades que el sistema imperante daba de forma virtual para los pobres y solo de acceso para los ricos. Ni una línea a lo que dañaba a la sociedad, silencio a los atracos, corrupción tanto por los criollos como por los extranjeros.

Algunos espacios se abrieron a voces como Eduardo Chibas, que al suicidase la nueva República constituida en 1902 sólo contaba 49 años de estrenada. Muy breve período en la historia de un pueblo, no exento de profundas conmociones sociales en la búsqueda de su cauce nacional y democrático. Guido García Inclán desde el periódico del aire denunciaba con valentía hacia donde conducían al país la dictadura imperante en la década del 50 del siglo XX.

Vandálica, humillante y triste se veían las calles llenas de niños con caras sucias y vientres hinchados, no precisamente por la llenura de un banquete sino por la abundancia de paracitos que le provocaba la poca higiene y la paupérrima alimentación; esas mismas calles que sufría el llanto de muchos padres por no poder traer a casa un bocado de comida; esa que bajó la mirada ante la vergüenza del campesino ultrajado frente a su familia; esa que sonrojada compartió con sus mujeres la humillación de la inferioridad. La discriminación racial que llegó hasta la segregación de negros y mulatos ante una sociedad que preconizaba solos posibilidades a los blancos.

Esa realidad era desconocida para los medios, donde no existían espacios para alimentar la esperanza, fomentar el optimismo bajo banderas de lucha y pervertir con anuncios comerciales los contenidos de las novelas rosa donde el melodrama hizo gala de personajes que alimentaban la ilusión de posibilidades a una vida mejor al precio de sometimiento y vejaciones de los ricos hacia los pobres.

En una encuesta realizada en 1957 resaltaba que los obreros agrícolas mal vivían solamente con 25 centavos diarios para comer, vestirse y calzarse y en muchos lugares era solo para los alimentos pues el pago se realizaba a través de bonos. El 60 % de los hogares del campo eran bohíos de techo de guano y piso de tierra sin agua corriente ni letrina sanitaria.

Hablar de refrigerador era desconocido para que servía y solo el 3% lo poseían, otro tanto ocurría con el fluido donde solamente alrededor de 12 % tenían corriente eléctrica. Peor aun sucedía con la composición nutricional donde eran casi inexistentes las proteínas.

Hoy esta realidad cubana es conocida por descripciones y no faltan quienes creen que es una campaña política de la actualidad, pero los que alcanzamos a vivirla sabemos el rigor y el abuso que se cometían con los pobres y los desclasados.

Desde muy temprano en la sierra maestra, con la aparición de Radio Rebelde, se fue abriendo paso a la verdad y se denunciaba con fuerza los crímenes y atropellos que cometía la dictadura de Fulgencio Batista.

La desproporción de la convivencia social hacia mella cuando la capital, solo con el 22% de la población disponía del 65% de los médicos y el 62% de las camas hospitalarias. Paradójicamente en el campo los servicios médicos eran casi nulos o nulos por no constituir prioridades esas poblaciones sin poder adquisitivos. De esta realidad no se ocupaba ningún medio cubrirla y poner en las páginas o antenas para denunciar la discriminación ya no solo por un problema de raza sino porque en ese terreno no interesaba ni a los políticos, comerciantes o cualquier estructura de poder pues este segmento de la sociedad no podía concurrir a la competencia del mercado.

Cuba cuenta desde la segunda década de la primera centuria del siglo XX la radio que desde 1922. Luego, a mediados de siglo se incorpora a los medios ya existentes, uno más completo y aglutinador: la Televisión.

Todos estos acontecimientos repercuten considerablemente en la agilidad, actualidad y dinamismo del ejercicio periodístico; sin apartar el espacio cada vez mayor que ocupaba la propaganda y la publicidad dentro del sistema de los medios de prensa. Precisamente el desarrollo de este fenómeno, garantiza en extraordinaria medida el sostenimiento y avance indiscutible de tantos periódicos, emisoras y canales de TV en esa época.

A la par de ese oportuno desarrollo, la sombra capitalista resguarda sus intereses en cada sector de la nación cubana. Según Ernesto Vera y Elio Constantín en “El periodismo y la lucha ideológica, durante los años de la república mediatizada la prensa dominante en Cuba tuvo un carácter netamente imperialista, reaccionario como consecuencia de la situación semicolonial”.

Quedaba claro, sin lugar a duda, que la libertad de prensa solo era ejercida por el poder y sus intereses, los profesionales de la prensa no eran consultados y lo más significativo de esta etapa es que todo periodista que se saliera de esta estrategia de comunicación podía ser separado o reprimido por las autoridades del gobierno dictatorial de turno. Siempre esta prensa encontró apoyo en la Sociedad Interamericana de Prensa (SIP), agrupación de dueños de las grandes publicaciones del continente, sin contar tampoco para ello el criterio de los periodistas asalariados integrantes de sus redacciones.

Al triunfar la Revolución en 1959 la prensa como toda la sociedad comienza un nuevo sendero hasta ese momento desconocido en la región donde la verdad constituye su paradigma. Preparar a los profesionales en el ejercicio de orientar e informar al pueblo fue tarea priorizada desde sus inicios. Ante estas tareas nace la idea de organizar a los profesionales de la prensa en la Unión de Periodistas de Cuba (UPEC), fundada el 15 de julio de 1963. Organización que ya comenzó su proceso para en junio efectuar su IX Congreso donde se debatirá los retos que hoy asume los medios de comunicación y sus profesionales para acompañar de forma eficiente y eficaz las transformaciones emprendidas bajo la bandera del socialismo.

Este proceso no solo cambia las formas de hacer sino las formas de pensar de cómo hacer. Hoy la prensa cubana cuenta con profesionales de calificación superior a otras etapas incluido categorías académicas y tecnologías que posibilitan el mayor acceso a la diversidad de fuentes.

El IX Congreso de la UPEC trazará, bajo la orientación del Partido, estrategias dinamizadas de una parte por los reclamos que hizo el VI Congreso y la I Conferencia del Partido Comunista Cubano y por otra parte para enfrentar sofisticadas campañas a través de los medios que han empleado presupuestos millonarios para sembrar el desaliento, la desconfianza y pretender hacer creer la invalidez del socialismo en Cuba.

martes, 16 de octubre de 2012

DEMÓCRATA O REPUBLICANO: “DINERO EN SERIO”


Cuando en enero del 2013 asuma quien asuma la Presidencia de los Estados Unidos, ya sea del Partido Demócrata o Republicano, qué podemos esperar que no sea lo mismo con un poco más o menos de lo anterior. Como en toda campaña electoral en los Estados Unidos, la actual carrera hacia la presidencia dejará ver, una vez más, de qué se trata tal democracia y tal libertad. Se hacen promesas para obtener "el voto de los negros", otros ni esos quieren, prefieren hacerlos con los latinos o no hablar directamente ni en contra ni a favor, pero lo que si queda claro que en una sociedad con concepciones discriminatorias siguen siendo los "negros", desposeídos, perseguidos, gentes de segunda. Y así, también, hay dulces promesas para millones de inmigrantes, hoy atemorizados de ser descubiertos por estar indocumentados, "ilegales". Todo lo anterior convierte a los negros, inmigrantes e indocumentados en una masa de exclusiones sociales que no responden categóricamente a los intereses ni de los candidatos y mucho menos de los gobernantes de ese país. Al final leeremos en más de un despacho informativo como concluyeron los festejos eleccionarios y podremos comparar cuales son los cambios y las similitudes de éstas con las de l888, descritas por Marti de la siguiente manera: “Músicas, candeladas, vociferaciones nocturnas, procesiones de seis horas, ¿qué no se compra con el tesoro enorme de los monopolios? También seguía insistiendo con la siguiente pregunta: “¿Qué Indiana está en riesgo? Pues allá van trescientos mil pesos en un cheque para comprar el voto flotante”. ¿Quién pone en duda que ayer era importante en la campaña electoral el dinero? ¿Quién duda que hoy ese dinero no sea multiplicado por los interesados en uno u otro candidato con posibilidades de ganar? ¿Quién pone en duda que se acuda a las trampas que ayer fueron validadas y hoy seran superadas en aras de la “Libertad”?. Marti lo refirió claramente: “Que la pasión o la opinión den noventa mil votos: los once mil que faltan se compran con cincuenta y cinco mil pesos” . Cuando en esa ocasión un voto costaba solamente cinco pesos. En algunos análisis actuales se pone de manifiesto que el dinero sigue siendo la brújula que marca el horizonte a seguir en las elecciones de los Estados Unidos. Por ejemplo: Se afirma que si un candidato no sale en los medios de prensa es porque no ha puesto dinero y eso no es serio. Como es sabido, en las campañas electorales el que más dinero pone más se acerca a la meta. Se trata de una oferta a fuerza de dólares y de arengas y llamamientos a resolver las "asignaturas pendientes", entre ellas las de género, seleccionando la mejor música para los oídos de mujeres hartas de estar hartas, tanto en la inclusión como en la exclusión. La recesión económica sigue firme y la sed de petróleo aumenta -ya no solo en el de Oriente sino el de Venezuela, Ecuador, Bolivia- como el presupuesto bélico y las adicciones a la cocaína, la marihuana, el éxtasis y la violencia en los videojuegos y en las escuelas. Por otra parte se dice que el dinero es la leche materna de la política. Lógicamente todo lo que esté fuera de ese entendimiento y se distancie del punto de vista de los intereses corporativos no encontrará respaldo del capital norteamericano y tendrá que desistir del sueño de gobernar el imperio aunque sea solo por un mandato. Si esto es así, y parece que no cambiará en lo fundamental, tanto desde que lo describiera Marti como que el dinero, en última instancia, compra los votos que hagan falta para completar, como ya ocurrió con Bush en la Florida, qué importancia tiene el discurso electoral si al final la política, en lo esencial, es la misma. Los candidatos ya anuncian, tanto los demócratas como los republicanos, cual será la posición hacia Cuba, Venezuela, Bolivia, Nicaragua, Ecuador y todos los países que no se alineen con la política de los Estados Unidos. Entonces nos queda claro que cuando Marti advertía que: “Ha de haber un poeta que se cierna sobre las cumbres de los Alpes de nuestra sierra, de nuestros altivos Rocallosos; un historiador potente más digno de Bolívar que de Washington, porque la América es el exabrupto, la brotación, las revelaciones, la vehemencia” nos proponía claramente que aunque los “gobiernos nos desconocieran, los pueblos tendrán siempre que amarnos y admirarnos”. En una nación de alrededor de 300 millones de personas, una candidatura que no obtiene cobertura de la radio o la televisión no es una candidatura de verdad, no son serios contendientes, porque no han juntado dinero en serio. Por tanto en una nación donde el dinero manda, ¿por qué va a dejar de regir el proceso político? Ya candidatos a la presidencia están ofreciendo en su programas mensajes sobre lo que se necesita en Estados Unidos, el tipo de Presidente que se requerirá desde el primer día para ser comandante en jefe que pueda cambiar el rumbo de la economía. Hasta ahora ningún candidato a la Presidencia de los Estados Unidos rechaza por completo la carrera de las armas que garantizan, no la seguridad nacional, sino, en primer lugar, el capital de los monopolios de la guerra. Por eso cuando estudiamos a Marti y comparamos el proceder de hombres de poder o aspirantes del poder no podemos dejar de pensar que las soluciones de los pobres no están en los resultados de las elecciones de Norteamérica. Tampoco podemos dejar de observar con atención cual será el proceder hacia nuestros pueblos. Corren en estos tiempos “argumentos” de campaña electorales basados en historias personales, prejuicios, descréditos sobre los contrarios, solución de las amenazas de los “terroristas”, países que supuestamente amenazan la seguridad nacional de los Estados Unidos. José Marti también observó muy bien la sociedad norteamericana, como ningún otro intelectual latinoamericano, sus características y el comportamiento de sus gobernantes y nos legó en su pensamiento cómo debía ser un hombre de bien: “La gloria no cede a los amantes bruscos que corren tras ella y la fatigan, sino a los amantes dignos que la respetan e intentan ganarse su afecto por sus altas obras” No podemos desconocer que en la política de Norteamérica imperan las ansias de poder, el egoísmo y el desprecio a los desposeídos. Aspecto que se le inculca a la sociedad envuelto en una “amenaza a la Unión” Los medios de comunicación juegan un papel importante en estas campañas y en el refuerzo de los valores de la “sociedad de consumo”, de la vida americana. Estas influencias, que a través de los medios, no solo quedan en el marco geográficos de los Estados Unidos sino que se tratan de generalizar como “producto cultural” en el cine, la televisión, la música y cuanto se pueda exportar para el consumo de los incautos, vigorizar el espejismo de la sociedad ideal a la “americana”. Los marginados y los inmigrantes son vistos y tratados como personas que empobrecen al Estado de la Unión. Por eso la sentencia martiana a la que debemos aspirar que todo gobernante, de cualquier lugar del mundo, la convierta en su paradigma de: “Sólo la moralidad de los individuos conserva el esplendor de las naciones”.

domingo, 2 de septiembre de 2012

LA COMUNICACIÓN DEL PODER MEDIATO: ¿NEUTRAL?


Panel sobre el poder mediatico: Expone Dra. Ana Teresa Badia en la Primera Bienal Internacional de la Radio. En una parte de su ponencia define la estrategia que la VOA para America Latina. .
Al intentar un acercamiento a las estrategias del discurso radiofónico para la contribución a la producción y reproducción ideológicas, puede hallarse la prevalencia de temas contenidos en la agenda de seguridad hemisférica de Estados Unidos que se sitúa dentro de la tendencia de la diplomacia norteamericana orientada por el paradigma ofensivo-globalista que lleva implícito el pensamiento estratégico y geopolítico del Norte. La actual estrategia para América Latina se apropia de parámetros utilizados en los años ochenta, pero ahora con un enemigo diferente: el supuesto terrorismo, los denominados estados fallidos, el narcotráfico y las migraciones masivas, entre otros asuntos considerados como “amenazas”. El alto grado de correspondencia entre el discurso radiofónico de la VOA y el discurso de las élites políticas de Estados Unidos armoniza con los resultados de investigaciones previas como las de Hallin (1992), Bennett (2004) y Robinson (2001), quienes han demostrado que los medios suelen apropiarse del discurso político y lo hacen suyo al masificar las principales argumentaciones encerradas en el mismo. La llegada del demócrata Barack Obama a la Casa Blanca representó para la VOA un punto de giro, manifestado en el incremento de la participación en sus espacios de los miembros de organizaciones “civiles” desestabilizadoras latinoamericanas. Desde enero de 2009 puede advertirse un aumento en el tratamiento por la VOA de las temáticas militares y las relacionadas con la sociedad civil
. Dentro del variado significado que se le da a la palabra MEDIO tomaremos la destinada a la COMUNICACIÓN y algunos han querido calificarla de un agente neutro. Sin embargo, en los grandes medios se puede apreciar con facilidad, a pesar de su estado aparentemente objetivo, su propia naturaleza determina el tipo y la calidad de la información que puede pasar por él. Cuando sabemos que entre Estados Unidos, la Unión Europea y Japón controlan el mayor por ciento de los Medios de Comunicación podemos imaginar el tipo de neutralidad a imponer al resto de los medios que los toman como fuentes de información. Asociado a esa neutralidad también está la llamada libertad de prensa, termino utilizado por los grandes medios como argumentos para descargar campañas sobre gobiernos y medios que luchan por salir del eje de la dominación de los poderosos y no emplear la comunicación ni para especular ni fabricar mentiras. En esta actividad se ha transitado más de cinco décadas en Cuba y hasta en ocasiones nos hemos defendido con los argumentos que no se correspondían, sin embargo muchos estudiosos se dieron cuenta que la libertad de expresión era impuesta de manera sutil o no por los dueños de los grandes medios de cuerdo a sus intereses, como veremos en párrafos posteriores, entonces de que libertad de expresión estaban hablando. En esta campaña contra Cuba, el ALBA y sus países miembros, es muy importante identificar el momento y las circunstancias, así como los líderes utilizados, para conocer las razones y objetivos que impulsan o la relación con otros hechos en preparación y requieren distraer la atención pública. El progreso de la tecnología ha generado la creación de medios más sofisticados, con mayores posibilidades de integración para servir de canal de información universal como ha sucedido con Internet. Este medio de comunicación moderno ha traído la posibilidad de la interacción de las fuentes, los medios y los públicos. Esta posibilidad si bien por una parte trae mayor acceso a la información y por ende mejora la inmediatez, por otra parte ha crecido la especulación sobre acontecimientos, la construcción de falsedades sobre medias verdades para tratar de confundir a la opinión pública y no pocos asumen, como efecto de campana, la repetición de lo que publican estos medios llamados lideres de la información. El manejo de la tecnología al servicio de la información es tan imperativo dominarlas como las técnicas del periodismo. Ello permite garantizar la comprobación, evaluación y pertinencia oportuna para no publicar lo que el poder mediático quiere y que a nuestros medios no le interesa. No se puede desconocer que la comunicación pasa por estructuras de las instancias masivas de la información ya sea la prensa, la radio y la televisión. “Se trata, según uno de los conceptos sobre medios de comunicación como “mecanismos que permiten la diseminación masiva de información facilitando la construcción de consensos sociales, la edificación y reproducción del discurso público y ciertos niveles de interacción principalmente de los nuevos medios independientes, alternativos y comunitarios” La programación radial informativa esta básicamente estructurada en revistas que abarcan todo tipo de información, programaciones abiertas donde la información puede ser publicada según llegue a la redacción y los noticieros. Pero al estudiar los factores que influyen en las programaciones, y desde luego en la creatividad radial en los países capitalistas, no se pude desconocer que como toda empresa está regida por el mercado de la oferta y la demanda. Si esa programación no tiene audiencia no tendrá inserciones de publicidad por lo que los contenidos seden a las presiones de la economía. La neutralidad del medio, la libertad de expresión, las defensas de derechos estarán sesgadas a favor del capital, de los intereses monopólicos. Muchos de los grandes medios están en manos de las esferas de poder político y económico como por ejemplo: AOL/Time Warner Inc., el mayor imperio mediático, conocido en América Latina por la revista Time. También el “The Washington Post Company abarca negocios mediáticos diversificados y educación, pero su principal operación es la publicación del diario homónimo, The Washington Post, la edición de revistas tipo magazine, televisión, cable, servicios de información electrónica y educacional” Solo para ilustrar con estos dos emporios mediáticos de los Estados Unidos. Lógicamente es muy difícil poder atender los comportamientos sociológicos de la audiencia, diseñar los contenidos enteramente al servicio de sus necesidades y situaciones laborales y de ocio desde estas perspectivas de interés hegemónicos. Los medios de comunicación y en particular la radio tiene el compromiso teórico de generalizar su oferta para llegar al mayor número de oyentes y discriminar a los menos posibles. Pero tales funciones en las economías de mercados han eliminado gran parte de los contenidos de otras épocas, especialmente los más creativos, y se han orientado hacia el seguimiento de la actualidad como un valor intrínseco de la radio por su rapidez para estar sobre de los acontecimientos inmediatamente. No pocas veces los profesionales de la información en la radio dirigen sus esfuerzos hacia los espacios puramente informativos y no reconocen que toda la programación es portadora de la virtud informativa, desde luego, teniendo en cuenta las características de cada espacio. Hoy más que nunca ello es una realidad y una necesidad al predominar los programas en vivos donde no hay necesidad de esperar al próximo programa informativo cuando en ese momento existe la posibilidad de informar a la audiencia de los acontecimientos o hechos más inmediatos. La programación informativa de la radio requiere la observación, evaluación e investigación para tomar las medidas oportunas, no dejar que se deteriore los contenidos que no son de interés al oyente. Además la planificación y orientación a los profesionales de la radio encargados de los contenidos debe ser oportuna, la valoración de las propuestas hay que hacerlas con rigor, saber que lo que se transmitirá cumple un objetivo, con una elaboración clara, directa y con el mínimo tiempo. Los programas que requieran tratamientos especializados deben estar conducidos por profesionales con experiencias y conocedores del tema así como los especialistas invitados, ello permite transmitir al oyente conocimientos para enfrentar riesgos o actitudes en beneficio de la sociedad. Importante, como en otros programas, se debe alentar la interactividad de forma productiva y ágil. A la par del crecimiento tecnológico también crece el cúmulo de información que llega a cualquier medio de comunicación con múltiples puntos de vistas, transmitir la pertinente, beneficiosa, enriquecedora del conocimiento social es el reto que hoy demandan de los medios. La radio cubana se esfuerza por capacitar por todas las vías posibles más la que el propio profesional se encarga de asumir personalmente para cumplir con tenacidad y creatividad la tarea de orientar, informar y alentar con optimismo a sus públicos.